Orgullo

Cuando las cosas no iban nunca bien. Cuando creces y todo en el cuál creías, se te echa encima.
Cuando las personas a quién quieres, se rebotan o desaparecen.
Pero entonces, llega eso que hace que no te sientas excluido para tener una buena vida. Llegan esas pocas personas que te aceptan. Algunas de ellas hasta te han impedido que caieras. Que caieras mucho más abajo de un pozo negro. Te dan una xispa de luz. Y luego otra, y otra.
¿No es suficiente? Déjame decirte que...
Eres todo lo que quiero. A pesar de mis continuos errores, estáis a mi lado. Del corazón que olvidé que latía, ha nacido un camino. Lo llaman confianza. Algo no muy sencillo para todos. Porque la confianza mata.
Y ahora, qué decir. Somos un mundo de demasiado orgullo. Demasiado egoísmo. Y yo he caído en la trampa. Esa asquerosa trampa del cuál todos, buenos o malos, hemos presenciado. Y no te atreves a afrontarlo. Quieres luchar, hacerlo posible. ¿Es tan complicado? Arreglar una cuerda, toda acumulada de nudos, no fue fácil. Pero es algo verídico. Ha ocurrido.
Déjenme aclarar que el perdón siempre estará ahí. No podemos engañarnos. La rabía se confunde con el odio. Y hay palabras que acabamos por arrepentirnos de haber dicho. Huyes de lo que te provoca un miedo, que te encierra poco a poco. Te encierra a las posibilidades que te ofrece el mundo. A las posibilidades que te ofrece tu vida. A las cuáles te ofreces a ti mismo.
No hay más razones para justificarlo. Solo hay una solución y seguiras teniéndola. Ellos nunca huiran de aquellos a los que aman. Ellos entenderán, y buscarán la forma. Porque tu te habrás esforzado ante tu estúpido orgullo. Y aun siendo egoísta, esto no es puro egocentrismo. No lo sería si no estuvieras así de arrepentido, adolorido. Desgarrado y poco satisfecho de esos errores individuales, o comunes.

F I N D

"El corazón, que no lo encuentro, que lo abandoné hace creo que dos meses ya. Abandono esa isla en la que vivía junto a ti. Naufragio. Me abandonaste en esta. Al igual que en el inframundo. Descolocada mirando el Tártaro, un agujero negro. Está tragandome trozo a trozo."

Sin rendirme, sin volver a sobrepasar mis límites, lo vi.
Descansando en esa isla, después de el abandono, pude verte. Fue como una teletransportación, apareciendo de la nada. Me acerqué a ti, y así, logré escapar. Logré pasar una página que llevaba tiempo releyendo una y otra vez, que me iba destrozando. Estaba a las últimas de poder llegar a la siguiente. Y tu no es que me ayudases, fuiste una buena razón para seguir adelante. Sigues siéndolo.
El corazón. No sé cuándo, solo el cómo, pero lo encontré. He vuelto a sentir. Con miedo, si. Pero ahora que puedo, no debo rechazarlo por temor, hay que luchar. Lucharé por todo aquello en lo que debo lanzarme, ahogarme si hace falta. Este órgano palpitante ha vuelto a tener vida. De forma diferente, pero, realmente, es algo increible.
Y mentiría si dijera que no me pierdo en tus ojos, como el reflejo de los míos, como expresar más de lo máximo que podría decirte. Porque es mirar y callar. Observar y no retroceder. Sonreír, pensar que, mientras veo, estoy deseando oír tu voz. Deseando escucharte, refugiarme entre tus brazos, desgastarme los rosados labios con los tuyos. Acariciar infinitas partes de tu cuerpo. Siento que nunca llegaré a todas. ¿Y sabes? Esos ojos, esos labios, esas caricias, como lo digiste, "Dejan sin toda palabra merecedora de romper ese momento..." Al igual que escucharte.
La sinceridad relata el hecho de no comprender que es aquello que me hace desearte, querer conocerte, querer saber que hay más allá de ti, más allá de lo que pueda llegar a sentir. Sentimientos que cada día que te noto, cambian. Pero la duda no es un tormento, hallaré la respuesta cuando llegue el momento. Hallaré como deberé apreciarte.
Aunque, no hay razón para decidir. Estamos y seguimos estando. Todo aquello que debemos hacer, lo correcto, es vivir el presente.

Un amigo especial

A ver, por dónde empezar. Me acuerdo perfectamente del primer día que te conocí. Ya solo en verte supe que algo había en ti. Ese día hasta te vi bailar por primera vez y ya sabía que eso, eso que tu haces con tantas ganas, es lo que te hace feliz.
Hablando de bailar, aun tenemos Roxanne pendiente, y cuando vengas, vas a bailarlo conmigo como que me llamo Sara guapo. Aunque no tengamos ni idea, lo haremos. Que grande Moulin Rouge, verdad? Se que te gusta. Algun día voy y te presento a Nicole Kidman cuando este trabajando en el cine, ya verás que si, yo lo sé, hazme caso.
Y luego, he ido conociéndote y he aprendido contigo, he cambiado más de lo que cambié en un año. Porque, sabes qué? Tu, solo tu, haces magia con las personas, si. Con solo ser tu mismo. Y eso es lo que más admiro. Eres mucho más de lo que alguien podría esperar de ti, o de lo que podrías esperar de ti mismo.
En fin, vayamos al grano. Aun sabiendo que es lo mejor para ti, porque es lo que deseas y sabes que será un milagro, es muy triste. Soy directa, sabes lo mucho que lloraremos cuando no estés, porque tu presencia es importante. Tan importante como otros, quizás, pero no tan especial. Ahora mismo, veo partir a una persona que en muy poco tiempo se ha convertido en alguien muy, pero que muy especial para mi. Imagínate los demás, ellos saben de lo que hablo. Tu solito te colocaste en mi camino y me digiste basta. Me cogiste la mano aun sin llegar a ese pozo negro. Y yo lo veía, madre mía si lo veía. Es negro, muy negro. Tu lo sabes. Me salvaste, Pol. Y no soy la única. La vida es dura con todo el mundo, pero tu te levantas y sigues adelante. No sobrevives, que va. Eso ya lo hiciste en su momento. Tu vives, Pol. Más que cualquier otra persona. Y voy a llorar cuando vea que no estás, lo sé. Fíjate, porque eres de esas pocas personas, de esos pocos amigos, que cuento con una sola mano. Eres el que me ha ayudado a ver esa chispa que me haría seguir hacia adelante. Hay gente que me dice que me he convertido en alguien fuerte, y tu me has ayudado. Gracias a ti he cogido otra vez el libro y he seguido intentando pasar la página. Te voy a decir algo, la he pasado totalmente. No por ti, pero tu me ayudaste con ello. Estaba hundida, llegue a mis límites y viniste tu, de casualidad. Un chico que tiene una mirada pura, unos ojos color miel preciosos también.
Y en palabras...
De una noche de luna llena me desperté,
caiendo, hundida, sin poder ver otro amanecer.
De un recuerdo, que por fin descanso
tu me ayudaste, y de él me desato.

Una chispa, tus ojos de color miel.
Un mano sincera, una persona fiel.
Unos pasos de ese chico, alocados.
Una película que adoras, la de enamorados.

Una voz que recordaré en cada momento,
de todos los raps y de Melendi, junto sus lamentos.
Una persona que supe verme caer.
Una persona que me ayudó a "ver para creer."

Me enseñaste hasta como amar una madre,
ver que ellas son reinas, un Eden, una infinita calle.
Una locura que nace de enfados,
pero que nos acepta a nosotros o a nuestros hermanos.

Gracias a ti, me acepto y me quiero.
Gracias a ti, me rehubico y espero.
Gracias a ti, espero y tengo paciencia con ello.
Gracias a ti, el camino lleno de huecos se me hace más esperanzado.

Joder Pol, joder. Tu eres de los pocos dónde he encontrado una persona, un amigo, un abrazo sincero...
Y te pido, por favor. Solo te pido una cosa. No cambies. Por nada del mundo dejes de ser tu mismo. Crece, hazte más maduro de lo que eres. Sigue. Porque tu, solo contigo mismo, serás grande. Muy pero que muy grande. Sigue adelante, trabaja, estudia, encuentra el amor de tu vida. Se de esos pocos hombres, personas grandes. Conviértete en el marido, en el padre, en el hermano, que toda persona, toda mujer quisiera tener.
Ama, enfadate, llora si hace falta. Vive...
Te quiero Pol, muchísimo. Todos te queremos, más de lo que nosotros mismos pensamos, o de lo que tu piensas.

P.D.: Felicidades de nuevo cumpleañero, y gracias por aparecer en mi vida.

https://m.youtube.com/watch?v=VsseJz4-5Hs