Eskimo Kiss

Qué pasaría si en el último mensaje te digera que te quiero. Qué pasaría si te contara con cada palabra que te echo de menos. Qué pasaría si en el límite del avismo explicara todas las estúpidas veces que haga falta, que te necesito.
Vivo en el pozo infinito de mis sentimientos, cayendo sin encontrar la salida a este dilema tan infinitamente profundo. Guardo cada recuerdo de ti en mi cofre del deseo, anhelando volver a ver tu escasa sonrisa en tus labios. Tan llena de nada como de pena parecía.
Olvido cualquier momento angustiante, pero no todos porque hasta los malos son lo mejor que guardo de ti.
Odiame por mis errores al no poder, en su momento, comportarme como debería y como realmente soy. Pequeña niña inmadura en mi arroja su propia mente al vacío para así poder satisfacer mi alma y a ella misma.
Congelo una escena de besos, unas de caricias y risas; pocas pero preciadas escenas de enfado. No olvidemos tampoco las primeras, las que menos puedo olvidar.
Me ahogo en este último párrafo, porque no consigo desfogar las ganas que tengo de ti a través de mis escenas, guardadas en mis pensamientos, convertidas en palabras y transmitidas a través de mis dedos. No puedo, no puedo parar. Deseo y desearía tanto que este mensaje llegara a ti que ya no puedo echarme atras a esta confeción fantasma.
P.D.: Por mucho que solo sean recuerdos, siluetas. Oh, dios mío, lo que daría por tener otro de tus besos esquimal.